“Quiero hacer una música tan perfecta que se filtre a través del cuerpo y sea capaz de curar cualquier enfermedad”, dijo alguna vez el guitarrista Jimi Hendrix. Tal vez lo consiguió con Are you experienced?, disco que lanzó en 1967, pero lo cierto es que la música, en efecto, tiene un enorme potencial sanador. “La musicoterapia consiste en el empleo de la música con fines medicinales. Fortalece la capacidad para enfrentar situaciones adversas”, cuenta Segundo Armas, médico y especialista en terapias alternativas.
DJ DOCTOR. Según Armas, cuando escuchamos las melodías que nos gustan, nuestro cuerpo libera serotonina, óxido nítrico, endorfinas y otras sustancias vinculadas al bienestar. En tal sentido, la musicoterapia es un método para aprovechar correctamente estos efectos.
“Lo primero que se hace es definir la identidad sonora del paciente, o sea, saber qué le gusta. Es como prepararle un historial clínico convencional”, precisa Armas. Al cabo de unas sesiones de reconocimiento, el terapeuta graba un disco con canciones que son del agrado del paciente y que serán escuchadas según las indicaciones. Mencionemos algunos campos de aplicación:
◦ESTRÉS, ANSIEDAD Y DEPRESIÓN. La musicoterapia ayuda a regular la tensión arterial, disminuye las hormonas del estrés y estimula la producción de neurotransmisores del bienestar.
◦ESTIMULACIÓN PRENATAL. Armas considera que los niños que escuchan música cuando están en el vientre tienen mayores posibilidades de ser más inteligentes y afectivos que el promedio.
◦SALA DE PARTOS. En vista de que la experiencia de dar a luz suele ser dolorosa, e incluso traumática, la musicoterapia puede usarse para crear atmósferas familiares y cómodas para la madre.
◦TRATAMIENTO COMPLEMENTARIO. En Brasil, la musicoterapia es empleada con éxito en pacientes con cáncer. Armas cuenta que resulta de mucha ayuda durante las sesiones de quimioterapia y, también, para manejar el dolor.
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