Sin embargo, otros estudios consideran que la cafeína estimula el sistema nervioso, mejora el desempeño mental, el procesamiento de la información, así como la asimilación de datos y toma de decisiones.
Marie-France Vecchierini, del Centro del Sueño y de la Vigilancia, ubicado en París, explicó que la cafeína se fija a ciertos receptores y estimula el sistema nervioso.
"Diversos estudios realizados en el Centro han demostrado que tomarse un café mejora la conducción de las personas soñolientas y ayuda a dar esa sensación de estar despiertos y alerta", añadió.
La cafeína, responsable de los mitos, es el único componente del café que provoca efectos fisiológicos de importancia, pues su efecto vasoconstructor disminuye el calibre de los vasos sanguíneos, lo que, no obstante, le convierte en un aliado de los medicamentos para el dolor de cabeza o la migraña.
Asimismo, un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Colorado demostró que el hábito de tomar café no es un factor en el desarrollo de colitis ulcerativa. De hecho, investigaciones de la Universidad Autónoma de Madrid concluyeron que la bebida puede promover la formación de flora intestinal.
El denominado "efecto cafeína" se puede explicar como un estado de agitación, ansiedad e irritabilidad, pero éste ocurre no porque ese elemento tenga la facultad de alterar la serenidad, sino cuando se ha consumido un límite mayor al que nuestro organismo está acostumbrado, anotó Marie-France Vecchierini.
Sobre la relación entre el consumo de café y el insomnio, la especialista francesa dijo que depende de cada una de las personas.
"Existe una sensibilidad individual según la constitución del gen del receptor de adenosina. Determinadas personas afirman incluso necesitar su dosis de café antes de irse a dormir y no por ello van a pasar una noche menos agitada", expuso.
Abundó que "en función de la dosis de cafeína ingerida y de la hora a la que sea consumida (más o menos tarde), una persona que duerma bien podrá pasar una noche agitada, y un insomne una noche muy agitada a lo largo de la cual se despertará varias veces. La cafeína aumenta la tensión nerviosa y la ansiedad, de ahí la importancia de escuchar nuestro cuerpo", acotó.
Es necesario aclarar que el café es una bebida natural, más no un alimento. La Organización Mundial de la Salud lo clasifica como un "componente de la dieta no nutritivo", por lo que al no ser considerado una bebida es ideal que su consumo se acompañe de un alimento.
Los beneficios del café saltan a la vista y no sólo se limitan al terreno de la salud, sino que también se trasladan a lo emocional y afectivo; por lo que a nadie le sorprende que el café sea una de las bebidas preferidas en el mundo.
Marie-France Vecchierini, del Centro del Sueño y de la Vigilancia, ubicado en París, explicó que la cafeína se fija a ciertos receptores y estimula el sistema nervioso.
"Diversos estudios realizados en el Centro han demostrado que tomarse un café mejora la conducción de las personas soñolientas y ayuda a dar esa sensación de estar despiertos y alerta", añadió.
La cafeína, responsable de los mitos, es el único componente del café que provoca efectos fisiológicos de importancia, pues su efecto vasoconstructor disminuye el calibre de los vasos sanguíneos, lo que, no obstante, le convierte en un aliado de los medicamentos para el dolor de cabeza o la migraña.
Asimismo, un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Colorado demostró que el hábito de tomar café no es un factor en el desarrollo de colitis ulcerativa. De hecho, investigaciones de la Universidad Autónoma de Madrid concluyeron que la bebida puede promover la formación de flora intestinal.
El denominado "efecto cafeína" se puede explicar como un estado de agitación, ansiedad e irritabilidad, pero éste ocurre no porque ese elemento tenga la facultad de alterar la serenidad, sino cuando se ha consumido un límite mayor al que nuestro organismo está acostumbrado, anotó Marie-France Vecchierini.
Sobre la relación entre el consumo de café y el insomnio, la especialista francesa dijo que depende de cada una de las personas.
"Existe una sensibilidad individual según la constitución del gen del receptor de adenosina. Determinadas personas afirman incluso necesitar su dosis de café antes de irse a dormir y no por ello van a pasar una noche menos agitada", expuso.
Abundó que "en función de la dosis de cafeína ingerida y de la hora a la que sea consumida (más o menos tarde), una persona que duerma bien podrá pasar una noche agitada, y un insomne una noche muy agitada a lo largo de la cual se despertará varias veces. La cafeína aumenta la tensión nerviosa y la ansiedad, de ahí la importancia de escuchar nuestro cuerpo", acotó.
Es necesario aclarar que el café es una bebida natural, más no un alimento. La Organización Mundial de la Salud lo clasifica como un "componente de la dieta no nutritivo", por lo que al no ser considerado una bebida es ideal que su consumo se acompañe de un alimento.
Los beneficios del café saltan a la vista y no sólo se limitan al terreno de la salud, sino que también se trasladan a lo emocional y afectivo; por lo que a nadie le sorprende que el café sea una de las bebidas preferidas en el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario