La Conselleria de Sanidad ha abierto una investigación sobre la posible relación de la red de agua potable de Alcoy con los sucesivos casos de legionela que viene sufriendo la ciudad. El departamento autonómico pretende averiguar si existen zonas de estancamiento en las que pueda anidar la bacteria, y si ésta se ha hecho resistente a los tratamientos. El director general de Salud Pública, Manuel Escolano, afirma que los 13 casos registrados este año en Alcoy entran dentro de la normalidad epidemiológica.
Escolano mantuvo ayer una reunión en Alcoy con los portavoces de los diferentes partidos que componen la corporación, después de que el gobierno municipal reclamara información sobre el goteo de casos de legionela que se ha venido registrando en las últimas semanas.
El director general dijo, en este sentido, que los 13 casos registrados este año entran dentro de la normalidad epidemiológica, aunque destacó que las altas temperaturas del principio del otoño han contribuido a que la incidencia haya sido un poco mayor.
Escolano, asimismo, defendió la actuación de su departamento desde que en 1999 comenzaran los brotes de la enfermedad. Así, recordó las actuaciones llevadas a cabo durante todo este tiempo, que han incluido el desmantelamiento y censado de los equipos de refrigeración industrial, sobre los que se mantiene un estricto control, y la identificación en los brotes de 2009 y 2010 de dos nuevas fuentes de contagio que no estaban citadas en la literatura científica, como son las máquinas de asfaltado y los trenes de lavado de coches.
También citó los numerosos controles a los que son sometidas las instalaciones de riesgo y la red de agua. En este sentido, informó que durante este año se han llevado a cabo 1.362 mediciones, 182 búsquedas, 462 inspecciones y 589 muestras.
A este respecto, y pese a que la red de agua potable está sometida a analíticas trimestrales en 19 puntos distintos, la Conselleria de Sanidad ha decidido profundizar en la materia y abrir nuevas líneas de investigación.
En colaboración con la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), el Centro Superior de Investigación de Salud Pública, los Laboratorios Labaqua y el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo, la Conselleria pretende averiguar si en la red hay zonas de estancamiento de agua en las que pueda anidar la bacteria o perderse los efectos de la cloración, y si la legionela se ha hecho resistente a los tratamientos.
Otra de las líneas de investigación abiertas pretende aclarar si la bacteria se enmascara en otros microorganismos, caso de las amebas o protozoos.
Con todo, Manuel Escolano quiso remarcar que "la calidad del agua de Alcoy es extraordinaria", muy superior a la de otras ciudades, y que se encuentra totalmente controlada a través de los análisis a la que es sometida de forma permanente.
Escolano también insistió en las peculiaridades orográficas y climáticas de Alcoy, que hacen que la legionela tenga mayor facilidad para propagarse.
Tanto el director general de Salud Pública como el alcalde, Antonio Francés, mostraron su disposición a colaborar mutuamente en el control de la bacteria, así como en el simposio que sobre la legionela está preparando el gobierno municipal para el próximo año.
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jueves, 8 de diciembre de 2011
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