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lunes, 12 de diciembre de 2011

30 pasos sencillos para perder peso o mantenerlo, aun en Navidad

Comer saludablemente y mantenerte físicamente activo son dos elementos esenciales para perder peso o mantener un peso saludable, aun durante la época festiva. A continuación encontrarás algunos consejos del Departamento de Salud y Recursos Humanos de Estados Unidos que te ayudarán a mantenerte en control en esta temporada navideña. Como siempre, acude a tu médico para que te realice un chequeo general y busca la ayuda de un nutricionista dietista licenciado para identificar los alimentos que más se ajusten a tus necesidades calóricas y a tus gustos.
Los adultos deben estar activos físicamente al menos cinco veces a la semana durante 30 minutos o más.
Los niños deben estar activos durante una hora diaria.
Prefiere la leche sin grasa a la leche entera.
Toma mucha agua, sobre todo antes de la comida.
Toma refrescos de dieta.
Si consumes bebidas alcohólicas, hazlo con moderación.
Toma agua o agua mineral y dale sabor con un toque de lima o limón.
No comas tarde en la noche.
No te salte las comidas ni el desayuno.
Come en platos más pequeños.
Come frutas y verduras como merienda.
Antes de repetir, espera entre 10 y 15 minutos. Quizá ya no desees repetir en ese momento.
En cada comida, siéntate y mastica despacio.
Come antes de ir al supermercado o a alguna fiesta.
Agrégale frutas a tus cereales favoritos.
Prefiere proteínas magras. Come carne, pollo, pavo y pescado magros o bajos en grasa. Prueba habichuelas secas como proteína magra.
Elige alimentos y bebidas que no tengan azúcar o edulcorantes con calorías como uno de sus primeros ingredientes.
Prefiere alimentos y condimentos bajos en sodio, de sodio reducido o sin sal.
Evita tomar porciones de alimentos mayores que tu puño.
Aumenta el consumo de fibra en tu dieta.
Sigue un horario de comidas regular.
Recompensa y reconoce tus esfuerzos.
Haz una lista de compras antes de ir a la tienda.
Compra jugos 100% frutales en vez de refrescos y bebidas azucaradas.
Condimenta las comidas con hierbas, especias y otros condimentos de bajo contenido graso.
No esperes a tener mucha hambre, come antes.
Toma sus medidas corporales para medir tus avances.
Sé realista. Vé haciendo con el tiempo cambios pequeños en lo que comes y en el nivel de actividad física que realizas. A menudo, los pasos pequeños funcionan mejor que los saltos gigantes.
Sé flexible. Encuentra el equilibrio correcto entre lo que comes y la actividad física que realizas.
Sé razonable. Disfruta de los alimentos que comes. Simplemente, no te exceda.
Cocina a la parrilla, al horno o al vapor en lugar de freír.