Por una negligencia médica, pierde la vida estudiante de la carrera de gastronomía en el municipio de Tulancingo, Hidalgo. Tan solo tenía 20 años.
Sus familiares dicen que fue por una presunta negligencia médica en la clínica del ISSSTE en ese lugar.
Todo comenzó cuando Rickie Louis acudió al hospital por intensos dolores de cabeza, presión alta y dolores en un brazo, pero el médico, Joel Amador Vargas le diagnosticó una crisis nerviosa, le dio medicamento y lo mandó a su casa.
Después de varias horas y ya en la madrugada, su familia al ver que su estado de salud empeoraba decidió nuevamente regresar al hospital y solicitar fuera atendido de emergencia, solo que esta vez le negaron el servicio y también el pase médico para ser trasladado a la capital del estado.
"Regresa al hospital la abuela del niño junto con una vecina a pedir un pase para que lo trasladaran a Pachuca y el doctor dice que no amerita el traslado. Se consigue la ambulancia de bomberos y bajan los paramédicos le dicen al doctor, ‘lo único que necesitamos es que nos autorice el pase a Pachuca’ y el doctor lo negó y dijo que el caso no lo ameritaba, es más les pidió a los paramédico que bajaran al paciente de la ambulancia y a los 20 minutos que lo bajaron, cayó en paro”, explicó el familiar Juan Carlos Ortega.
El joven entró en paro y murió prácticamente en la ambulancia de bomberos. Por eso, cientos de personas salieron a las calles del municipio para exigir castigo para este médico que dicen, dejó morir a Rickie Louis.
El doctor ya fue cesado, además de que se inició una averiguación previa en su contra para deslindar responsabilidades, aunque la familia del fallecido espera castigo y evitar que más personas sean víctimas de una mala atención como la que le costó la vida a este joven.
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